domingo, 19 de abril de 2015

Pauta de tratamiento de las oclusiones venosas de retina



En el tratamiento de las oclusiones venosas de la retina (OV) debemos en primer lugar detectar factores de riesgo sistémicos y corregirlos como la hipertensión, dislipemia, diabetes, tabaco, fármacos como contraceptivos orales, presión intraocular alta, hipotensión arterial nocturna farmacológica.
Una investigación de trombofilia se debe considerar cuando no hay otra etiología obvia presente.
La terapia de inyección (por ejemplo, los fármacos anti-VEGF) se puede dar de inmediato para ov con edema macular (EM).

La rejilla macular (RM) por lo general requiere un período de al menos 3 meses de observación dando tiempo a que reduzcan las hemorragias y se pueda valorar mejor el estado de la perfusión.
La RM es moderadamente eficaz para ovrama con EM sin isquemia.
Las inyecciones intravítreas en serie de fármacos a-VEGF para OV con EM son notablemente eficaces, pero costoso.
La terapia anti-VEGF no aborda el problema de fondo en ov, y las reinyecciones frecuentes son necesarias.
Las inyecciones intravítreas seriadas de triamcinolona no son más eficaces para ovrama con EM que RM.
Las inyecciones intravítreas seriadas de triamcinolona son más eficaces para ovcentral con EM que la observación, pero con efectos secundarios de desarrollo de catarata en pacientes fáquicos y elevación de la presión intraocular en una fracción significativa de los casos.
La inyección de dexametasona intravítrea es eficaz para OV con edema macular. El desarrollo de cataratas en pacientes fáquicos es común, así como elevación de la presión intraocular controlable con la terapia tópica.
La vitrectomía (VPP) puede reducir el edema macular en OV con EM, pero con menor frecuencia mejora la agudeza visual, tal vez porque se tiende a utilizar tarde en el curso de OV y después de que otros tramientos menos invasivos fallan.
Debe tenerse en cuenta que tras VPP se acorta la V1/2 de los fármacos intravítreos por lo que no debería ser la primera opción.
La terapia sistémica para OV incluyendo la trombolisis, anticoagulación, y el tratamiento de la hiperhomocisteinemia, ha mostrado poca eficacia y rara vez es usado.
La hemodilución isovolumétrica ha demostrado eficacia en OV con EM, pero no se suele utilizar debido al tiempo que requiere, el gasto, y la aparición de los a-vegf.
En un paciente joven sin factores de riesgo vascular y con síntomas leves, excelente AV y signos leves de un OVCR no isquémica, a menudo es prudente observar al paciente porque muchos casos se resolverán espontáneamente.
Este podría ser un buen algoritmo para el manejo de las oclusiones venosas de retina: